Como sabéis,
en invierno los resfriados, gripe y otros tipos de enfermedades son habituales,
debido a la caída de temperaturas. Por ello, en esta época podemos encontrar
varios alimentos que nos proporcionan ayudas para poder hacer frente a dichos
cambios de temperatura y sus consecuencias. Entre ellos los rábanos son plantas
consideradas de invierno. Este tuberculo, concretamente, pertenecen a las
Crucíferas al igual que las coles, brócoli, rúcula…
Una de sus
propiedades es la vitamina C, por ello se considera un gran aliado
antienvejecimiento y antioxidantes. También ayuda a eliminar los residuos que
se acumulan en el organismo por ingestión. Pero la vitamina C no solo es un
buen antioxidante , también ayuda a formar colágeno importante para los huesos,
nervios y tendones.
Según una
información obtenida de la web botanical-online, los rábanos junto con las cebollas y ajos
parece tener una importancia especial en la prevención de algún tipo de cáncer
o inhibición de las células cancerosas. La razón se encuentra en la presencia
de componentes azufrados.
El rábano es
aconsejable para el aparato digestivo ya que aumenta la flora intestinal
aumentando algunas bacterias necesarias para el tracto digestivo. Pero también
tiene la capacidad de neutralizar las bacterias dañinas para la salud, ubicadas
en el intestino.
Este producto,
se acostumbra a incluir mucho en dietas debido a su bajo aporte calórico y su
gran cantidad de fibra así como potasio siendo muy diurético.
Tipos de
rábanos
Aunque es
considero un producto de invierno, también hay rábanos de primavera sembrados
en Europa, en climas de temperatura fresca, suelos húmedos … como tipos
encontramos los “desayuno francés” que es alargado y rojo con la punta blanca;
el carámbano que es blanco de forma alargada como una zanahoria.. y otras
variedades como el Daikon.
Los rábanos de
invierno se clasifican en tres variedades: la japonesa, china y europea. Entre
estas variedades encontramos rábanos de color rosa de forma alargada con la carne
blanca y sabor picante; rábanos blancos alargados y el rábano negro del que
hablaremos ahora.
Rábano negro: el
rábano negro español es de tamaño más grande que el resto y de color negro por
fuera y blanco por dentro. Sus formas pueden ser redondas o cilíndricas pero
bastante picante. Por ello, es aconsejable pelarlo bien antes de consumirlo
para rebajar su intenso sabor.
Este tubérculo
es rico en vitamina C, potasio, azufre y vitaminas del grupo B. en la medicina
Ayurvédica, se utiliza para promover la buena salud digestiva y la
desintoxicación del hígado, estimula el sistema inmunológico y combate el
envejecimiento.
Este producto
se puede consumir tanto crudo como cocido. También salteados con un poco de
mantequilla, cortados con mandolina para la ensalada, Horneados para hacer
chips o como ingrediente de sopas y pastas.
Estas son
pequeñas informaciones sobre un tubérculo poco consumido que aporta grandes
beneficios al organismo. Si nos fijamos un poco, veremos que en cada temporada,
la naturaleza nos ofrece diferentes productos que nos aportan los nutrientes
esenciales para sobrevivir las inclemencias del tiempo sea frio o calor. Por
ello, hay que respetar el medio ambiente y seguir los dictámenes que la propia
Tierra nos ofrece. Con eso aprenderemos a cuidarnos y estar saludables. Solo
sentido común y productos de proximidad.
Contraindicaciones
y efectos secundarios
La principal
contraindicación que se le atribuye al tubérculo es su acción anti-tiroidea. Su
consumo excesivo puede producir irritación gástrica, reacciones alérgicas. Por
tanto, y como siempre digo, todo en su justa medida. Una porción de rabano una
o dos veces a la semana es perfecto pero dos raciones diarias es excesivo. Sus
porciones, además deben ser pequeñas, es decir no tomar más de dos o tres
rábanos en una ensalada.
Montserrat A
No hay comentarios:
Publicar un comentario