Cohousing y la vejez actual

Cuando leamos la palabra cohousing no pensemos  en un modernismo que pronto pasara de moda y que ha sido creado como postureo.

Es una nueva forma de vivir debido al aumento de la esperanza de vida. Hoy en día los niños nacen con una media de esperanza de vida de 83 años, así que vivir 100 años acabará por dejarnos de sorprender.

Sin embargo, esta esperanza de vida hace que todo cambie. La vejez tal y como se entendía en antaño, ya no es así. Tener 65 años ya no es signo de vejez si no de un periodo nuevo en la vida. Las personas mayores están mejor formadas, son más exigentes, necesitan más estímulos, son más ambiciosas… por tanto, también necesitarán una asistencia diferente a la actual con otras necesidades. La pregunta es : ¿la sociedad y las herramientas sociales están preparadas para las nuevas exigencias y necesidades de las personas mayores del futuro?

En la revista Xl semanal del 24 de septiembre de 2017 , Ixone Diez Landaluce escribió un artículo sobre este nuevo concepto Cohousing , el cual he utilizado como base para este post.

El cohousing es una alternativa a las residencias geriátricas que en nuestro país existen unas 350.000 plazas y que solo el 25% son plazas públicas. Este nuevo concepto significa compartir vivienda, apartamentos de unos 50mt cuadrados, y zonas comunes con otras personas como biblioteca, jardines, huertos, salas de estar… pero no es un concepto tan nuevo como pensamos ya que en Escandinavia ya hace tiempo que funcionan.

Este concepto nace a partir de la imposibilidad o gran dificultad de acceder a una plaza de residencia pública y decantarse por una privada era demasiado oneroso y por tanto imposible de mantener durante un tiempo que nadie sabe de cuánto será.

Un grupo de amigos pensó en esta situación cuando se plantearon vivir juntos y descartar la idea de estar en un geriátrico. En el 2000 empezaron a buscar terrenos en Madrid para poder construir un espacio donde continuar viviendo y en el 2003 se mudaron. Cuatro años después, convivían 83 personas mayores de 65 años. Las condiciones son las siguientes: los socios aportan 145.000 euros más una mensualidad de 1200 euros por pareja o bien 1000 por personas para pagar los servicios de limpieza, lavandería, portería, cocina… cierto es que este proyecto no es para todos los bolsillos teniendo en cuenta el desembolso inicial y las restricciones a la hora de la venta .

Con este proyecto se solventaban muchos problemas como la soledad, el no estar atendido, el sentirse acompañado en todo momento, tener el espacio de vida limpio, no preocuparse por comprar o cocinar y sobre todo, no depender de los hijos evitando problemas. Los modelos de convivencia han cambiado y ahora no es tan sencillo ocuparse de los padres mayores cuando se tienen familia y trabajo externo que atender. La vida ha cambiado en muy poco tiempo.

Aunque este sistema no está hecho para todo el mundo. No todo el mundo está predispuesto a vivir dentro de una comunidad, no todos aceptan el compromiso  personal que se requiere. No olvidemos que la vejez también va acompañado de rarezas y de manías y no siempre son aceptables dentro de una comunidad aunque también se podría plantear de otro modo, utilizar esa vida en común para minimizar esas rarezas que la soledad a veces nos aporta. No hay normas dentro de la comunidad pero la corrección y el respeto deben estar siempre por encima de todo. Pero en caso de conflicto siempre hay un mediador para resolverlo.

Debido a esta iniciativa, la administración pública ha impulsado los pisos tutelados, pero solo si es mayor de 65 años y que se cuenta con algunos servicios comunes dentro del edificio. Sin embargo no se pueden comparar ya que el cohousing es un modelo cooperativo y autogestionado.

Según los fundadores de este proyecto, que tienen expandido este sistema en diferentes ciudades,  dicen que no todos los proyectos son iguales: hay dos modelos  unos se basan en la vida conjunta, cooperación y otros se centran en la asistencia pensando en el futuro y en la gran dependencia.

Pero todavía hay que esperar a que este tipo de proyectos maduren más debido a que en algunos proyectos obligan a salir a aquel socio que está en situación de dependencia extrema. Lo bueno de todo este nuevo concepto es que obliga a las administraciones públicas a replantearse el sistema para ofrecer el derecho de vivir una vejez digna no solo tener una asistencia y para ello es necesario un cambio de paradigma.

Montserrat A

Cohousing and current old age

When we read the word cohousing, let's not think about a modernism that would soon go out of fashion and that has been created as a posture.

It is a new way of living due to the increase in life expectancy. Today, children are born with an average life expectancy of 83 years, so living 100 years will end up surprising us.

However, this life expectancy makes everything change. Old age as it was understood in the past, is no longer like that. Being 65 years old is no longer a sign of old age, but a new period in life. Older people are better trained, they are more demanding, they need more stimuli, they are more ambitious ... therefore, they will also need assistance different from the current one with other needs. The question is: is society and social tools ready for the new demands and needs of the elderly of the future?

In the weekly Xl magazine of September 24, 2017, Ixone Diez Landaluce wrote an article about this new Cohousing concept, which I used as the basis for this post.

Cohousing is an alternative to geriatric residences that in our country there are 350,000 places and only 25% are public places. This new concept means sharing housing, apartments of about 50 square meters, and common areas with other people such as a library, gardens, orchards, living rooms ... but it is not as new a concept as we think since in Scandinavia they have been working for a long time.

This concept was born from the impossibility or great difficulty of accessing a public place of residence and opting for a private one was too onerous and therefore impossible to maintain for a time that no one knows how much it will be.

A group of friends thought about this situation when they considered living together and discarding the idea of ​​being in a nursing home. In 2000 they started looking for land in Madrid to be able to build a space to continue living and in 2003 they moved. Four years later, 83 people over 65 lived together. The conditions are as follows: the partners contribute 145,000 euros plus a monthly payment of 1,200 euros per couple or 1,000 per person to pay for cleaning, laundry, porter, kitchen services ... it is true that this project is not for all budgets taking into account account for the initial outlay and restrictions at the time of sale.

With this project solved many problems such as loneliness, not being served, feeling accompanied at all times, have a clean living space, not worry about buying or cooking and above all, not depend on children avoiding problems. The models of coexistence have changed and now it is not so easy to deal with older parents when they have family and external work to attend. Life has changed in a very short time.

Although this system is not made for everyone. Not everyone is predisposed to live within a community, not everyone accepts the personal commitment that is required. Do not forget that old age is also accompanied by oddities and hobbies and are not always acceptable within a community but could also pose otherwise, use that life together to minimize those oddities that solitude sometimes gives us. There are no rules within the community but the correction and respect must always be above all. But in case of conflict there is always a mediator to solve it.

Due to this initiative, the public administration has promoted the sheltered floors, but only if it is over 65 years old and that there are some common services within the building. However, they can not be compared since cohousing is a cooperative and self-managed model.

According to the founders of this project, who have expanded this system in different cities, they say that not all projects are the same: there are two models, some are based on joint life, cooperation and others focus on assistance thinking about the future and about the great dependence.

But we still have to wait for this type of projects to mature more due to the fact that some projects force out that partner who is in a situation of extreme dependence. The good thing about this new concept is that it forces public administrations to rethink the system in order to offer the right to live a worthy old age, not just to have an assistance and for that a change of paradigm is necessary.

Montserrat A