AJIACO |
Hace dos años
que regresé de Colombia, casi una segunda
patria para mí, después de una buena
experiencia.
Allí aprendí
mucho sobre la vida. La verdadera vida, de lucha por sobrevivir, de aprender a
saber que es importante, de sus matriarcados y la fuerza femenina que se ve y
se siente en la sociedad.
Pero hoy no
hablaremos de aspectos sociales, no por ahora. Hablaremos de su gastronomía y
de su buen hacer. Cuatro de los 50 mejores cocineros /as de Latinoamérica se
encuentran en Colombia. Ellos son Harry Sasson, Juan Manuel Barrientos, Jorge y
Mark Rausch y Leonor Espinosa.
Colombia es
uno de los países más biodiversos del Mundo. Su difícil orografía que ampara
grandes maravillas y que una de ellas es el gran abanico de productos que nos
regala la naturaleza. Su clima diverso y cambiante hace que sus productos estén
llenos de vitaminas y minerales beneficiosos para nuestro organismo.
Pero este
descubrimiento y desarrollo culinario también se d en Perú, México y Argentina.
Estos cocineros, gracias a su talento redescubriendo productos autóctonos como
el lulo y la gulupa, tubérculos andinos y patatas autóctonas de Colombia.
Lo más
sorprendente es ver la cantidad de variedades de frutas, verduras y hierbas
aromáticas que tienen pero lo mejor es ver como los utilizan en esos platos de
largas cocciones que terminan siendo un manjar como el ajiaco, mondongo,
mamona, tamales… cada uno de ellos utiliza y ensalza algún producto
superviviente como la yuca. Producto principal en la alimentación de los
pueblos que habitan en el Amazonas.
José Manuel
Barrientos hace un pan con yuca servido sobre arboles de cobre elaborados por
artesanos del Amazonas. Harry Sasson condimenta con palmito de Putumayo,
producto exitoso de un programa de sustitución de cultivos y que los campesinos
que lo cultivan tienen una opción a cultivos legales.
Jorge Raush
sirve pez León como un manjar de delicado paladar, cercano al mero, pero es un
depredador de otras especies marinas, con lo cual, se ayuda a que la superpoblación
de este pez disminuya.
No olvidemos
que el comensal colombiano es exquisito, sofisticado y abierto a experiencias
nuevas pero bien preparadas y cocinadas. Su exigencia es máxima.
La cocina
colombiana tiene raíces árabes además de influencias indígenas, africanas y
europeas. Su pluralidad se puede ver en cualquier restaurante donde degustar un
plato siempre es sinónimo de experiencia y placer.
Si tenéis
previsto viajar a Colombia no dudéis en
degustar sus jugos tanto dulce con ácidos y su gastronomía autóctona
como la carne de caracola estofada, el jugo de lulo o maracuyá, los mangos de
azúcar o sus pescados a la brasa.
Experimentar
con todos los productos que la tierra colombiana nos ofrece, es todo un
espectáculo de sabor y color. Una bendición de Dios.
Montserrat A.
Colombia and its gastronomy
Two years ago
I returned from Colombia, almost a second homeland for me, after a good
experience.
There I
learned a lot about life. The true life, of struggle to survive, of learning to
know what is important, of their matriarchies and the feminine strength that is
seen and felt in society.
But today we
will not talk about social aspects, not for now. We will talk about its
gastronomy and its good work. Four of the 50 best chefs in Latin America are in
Colombia. They are Harry Sasson, Juan Manuel Barrientos, Jorge and Mark Rausch
and Leonor Espinosa.
Colombia is
one of the most biodiverse countries in the world. Its difficult orography that
shelters great wonders and that one of them is the wide range of products that
nature gives us. Its diverse and changing climate makes its products are full
of vitamins and minerals beneficial to our body.
But this
discovery and culinary development is also found in Peru, Mexico and Argentina.
These chefs, thanks to their talent rediscovering local products such as lulo
and gulupa, Andean tubers and native potatoes of Colombia.
The most
surprising thing is to see the amount of varieties of fruits, vegetables and
aromatic herbs they have but it is best to see how they use them in those long
cooking dishes that end up being a delicacy like ajiaco, mondongo, mamona,
tamales ... they use and praise some surviving product like cassava. Main
product in the diet of the peoples that inhabit the Amazon.
José Manuel
Barrientos makes bread with yucca served on copper trees made by artisans of
the Amazon. Harry Sasson spices with heart of Putumayo, successful product of a
program of substitution of crops and that the farmers who cultivate it have an
option to legal crops.
Jorge Raush serves
Lion fish as a delicacy of delicate palate, close to the grouper, but it is a
predator of other marine species, which helps the overpopulation of this fish
to diminish.
Do not forget
that the Colombian diner is exquisite, sophisticated and open to new
experiences but well prepared and cooked. Your demand is maximum.
Colombian
cuisine has Arab roots as well as indigenous, African and European influences.
Its plurality can be seen in any restaurant where tasting a dish is always
synonymous with experience and pleasure.
If you plan to
travel to Colombia, do not hesitate to taste their juices, both sweet with
acids and their local gastronomy, such as stewed conch meat, lulo juice or
passion fruit, sugar mangoes or their grilled fish.
Experimenting
with all the products that Colombian soil offers us, is a show of flavor and
color. A blessing from God.
Montserrat A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario