viernes, 26 de enero de 2018

EL PRIMER CLUB DE LECTURA EN DURÁN LORIGA: A CORUÑA

Llevo pocos meses viviendo en A Coruña y siendo parte de esta sociedad gallega que me parece  de lo más interesante y mágica.
No es fácil relacionarse cuando llegas a un lugar donde no conoces a nadie  y por ese motivo, decidí buscar actividades que me ayudaran a conocer personas, a relacionarme  con ellas y así poder integrarme poco a poco, a esta sociedad nueva para mí.

Cuando empiezas a moverte y buscar este tipo de actividades, te das cuenta que este lugar es una ciudad que rebosa cultura y que sus habitantes poseen un don especial para ello. Aunque lo más sorprendente es ver como personas con una edad superior a la mía, están ávidas de búsqueda, vida y cultura. Motivadas para leer, hablar, relacionarse y permanecer en la sociedad activa de la que nadie quiere salir, se tenga la edad que se tenga.

Después de varios meses y con ayuda de mi cuñada, me apunté a un club de lectura de tantos que se organizaban en la ciudad, pero este era especial. Era la primera vez que se organizaba en la  Biblioteca Durán Loriga y yo iba a ser parte de esta nueva experiencia y proyecto.
Debo reconocer que al principio me daba algo de pavor, pues nunca había participado en un club de lectura y además sabía que el resto de personas que iban a componer este grupo podían ser personas, culturalmente hablando, superiores a mí. Sin embargo, eso también fue un reto y lo acepté con ganas e ilusión.

La experiencia está siendo increíble. Las elecciones de las lecturas son variopintas e interesantes pero muy bien elegidas. Todas con un objetivo y el principal, el de adaptarnos a todo tipo de escritores, lecturas y libros.

Cada una de ellas, diferente en tema, estructura, intensidades y color. Eso hace que cada libro requiera un esfuerzo y un paso más hacia la adaptabilidad y el cambio.
Ya sabemos que inicialmente, no es agradable salir de la zona de confort pero el hecho de cambiar de títulos, temas y estructura, hace que nuestro cerebro tenga que hacer un esfuerzo  y eso, revitaliza la mente. Forzar la materia gris para entender y cambiar de registro, en definitiva, es activar el cerebro y acostumbrarnos a los posibles cambios, aprendiendo a aceptarlos como algo normal y no como algo negativo. Ayuda a liberar las resistencias humanas a los cambios.

Sin embargo, lo que más motiva y enriquece es ver como las personas responsables de organizar y gestionar el club de lectura  se involucran al 100%.
Todos sabemos que las cosas se pueden hacer bien, mal o regular, pues bien, esto está hecho con ganas y dedicación. Gustando lo que se hace, queriendo hacer partícipe a los demás de la cultura, querer abrir nuevas puertas a los componentes del club de lectura haciendo que tengamos ganas de ir y de empezar nuevo libro y eso solo se consigue con personas que aman lo que hacen.

Elena Corzo es la responsable de nuestro grupo y de hacernos disfrutar de cada reunión. No solo nos trae el libro seleccionado, nos aporta información adicional de la lectura, busca filmografía, si la hay. Selecciona algunos fragmentos para que comparemos el libro con la película, nos lanza ideas para debatir y poder profundizar sobre el tema del libro, sobre la trama, sobre el hilo conductor del mismo, sobre los personajes que siempre te enseñan algo y te recuerdan realidades sociales… pero jamás dando su opinión, evitando eclipsar a los componentes del club, nosotros. Tiene esa sutil capacidad de ofrecernos las herramientas necesarias para pensar, evolucionar y que nos sintamos con seguridad para poder hablar ampliamente del tema de reunión.

Creo que esto es el cimiento de lo que tiene que ser una actividad. Algo estudiado, elegido, seleccionado con un objetivo y llevado con un orden y una preparación para que todos podamos opinar, hablar y reírnos, si se da el caso.
He estado en otros grupos, participando de otras actividades pero nunca me he encontrado en la situación con seguir hablando del tema después de finalizar con la actividad. Eso significa haber sabido motivar al oyente para que siga disfrutando de la actividad aunque no estén presentes los moderadores.

He querido hacer este pequeño halago a Elena porque es de las pocas personas que he conocido, que le gusta lo que hace y que así te lo transmite. No es su trabajo, es también algo que ama y que tiene la capacidad de transmitirnos. Creo que cuando nos encontramos frente a un trabajo bien hecho hay que decirlo, quizás así, alguien puede pensar que trabajar con ganas y motivación sigue teniendo su valor.  Gracias!!!!

Sabéis que de vez en cuando hablo de mujeres ejemplares en mi blog. Mujeres que han destacado por algún motivo pero hoy hablo de Elena, una persona que me ha causado una gran impresión por su profesionalidad pero sobre todo, por su amor a lo que hace.
Hace tiempo que no tengo a alguien que tenga la capacidad de transmitir su pasión por el trabajo que hace, evidentemente, no a todo el mundo le gusta su trabajo o bien el papel que desempeña en él puesto que no lo podemos elegir, lamentablemente. Pero Elena es especial y creo que parte de esa soltura que estoy adquiriendo es gracias a ella.

En cuanto a la integración, estoy en ello. Seguro que lo consigo, aunque lo mejor de todo es observar y conocer a las personas así como sus movimientos, sus miradas y su comportamiento, eso es la principal puerta hacia la integración. Hacer el esfuerzo de escuchar y aprender de ello siempre me ha funcionado aunque cometiera errores.
El grupo es maravilloso y mi integración va paso a paso, aprendiendo, disfrutando y sobretodo sintiéndome feliz en un lugar que no es el mío pero que me tienden manos para que el esfuerzo sea cada vez más nimio.

A todo esto yo lo llamo verdadera “normalización”.

Montserrat  A


No hay comentarios:

Publicar un comentario