De Neda a San Sadurniño.

Este fin de semana de Mayo hemos paseado por parte de las cuencas de los ríos Castro y Belelle. Lo de pasear es un decir pues el desnivel y los km totales no fueron pocos pero como siempre, mereció la pena. El tiempo fue fantástico y eso hizo que se disfrutara mucho más el paisaje, que por sí, es una maravilla y digno de ver y hacer el esfuerzo.

En primavera se sabe que la naturaleza despierta y todo está lleno de vida y color pero por si fuera poco, pasear entre fervenzas como la de Naraío y Belelle todavía incluye más intensidad y pasión primaveral si cabe.

La primera parada se hizo en Narón para tomar un café y un desayuno, necesarios para tomar fuerzas y emprender la nueva aventura. De allí tomamos el bus hasta el aparcamiento de Igrexafeita donde comenzamos el descenso y empezamos a calentar pierna con tranquilidad hasta llegar al río Castro pasando por la aldea de Remiceiro. Caminamos paralelos al río envueltos por la vegetación típica de la ribera como Sauces, freixos, avellaneros y algún roble y castañar.

El camino nos sorprendió ya que está lleno de tritones y ranas, las cuales se asustaban al ver pasar tal cantidad de gente por un lugar tan tranquilo y poco transitado. Seguimos el camino que nos condujo a un promontorio que domina todo el valle, coronado por el Castillo de Naraío construido a principios del S. XIV aunque su estado es ruinoso y queda muy poco de el, sin embargo , es interesante visitarlo y ver el entorno.

Al descender,  hacia la central hidroeléctrica nos encontramos con un desvío que nos condujo a la impresionante Cascada. Era precioso y el lugar lleno de energía aunque el espacio que había como mirador era pequeño y tuvimos que hacer turnos para poder verlo, sin ser un problema.

De allí, atravesamos la aldea de Riolimpo y continuamos río abajo hasta llegar al  núcleo principal de Naraío al que accedimos por el Puente da Ferrería.

Comenzamos el ascenso al Monte dás Louseiras, pero antes invertimos tiempo en echar una ojedad a la iglesia barroca de Santa María. Poco a poco íbamos ganando altura hasta llegar a los 452 mt pero no sin deleitarnos con el paisaje que nos rodeaba: Cara al SO la ría de Ares, A Coruña y al fondo las Sisargas, a nuestros piés la ría de Ferrol, al NO Valdoviño, al N las Sierras da Capelada y A Faladoira, cara al Este, O Forgoselo, Monte Fexa y más a llá la Sierra de “A Cova de Serpe”. Si esto no fuera suficiente, al Sur la Sierra de Montemayor con el monte Xalo teniendo por espalda la central térmica de Meirama.

Después de un pequeño descanso, porque la belleza tiene un precio, descendimos hacia la cuenca del Río Belelle  y caminamos por su embrujada ribera hasta llegar a un pequeño embalse, la presa de la Fervenza, donde comienza el canal que nos acompañó hasta un pequeño “aliviadero” que marca el punto de descenso hasta la segunda fervenza.  La fervenza de Belelle a diferencia de la de Naraío es su altura y mucho más impresionante. Merece la pena el esfuerzo y ver las maravillas de la naturaleza y más si el día acompaña como acompañó.

De allí solo nos quedaba un pequeño ascenso hasta un bonito mirador desde donde pudimos contemplar el salto de agua al completo, ya que tiene varios tramos.  De este punto al final de la excursión quedaba poco pero antes aun pudimos visitar una pequeña iglesia de “Santo André de Viladonelle”.

Esta excursión, aparte de bella, exige algo de esfuerzo y preparación. Está catalogada por expertos en dificultad media y esfuerzo medio aunque eso dependerá de la preparación física de cada uno así como de su capacidad pulmonar. La distancia total recorrida fue de 20 kilometros y medio y una altura máxima de 452mt. Recomiendo esta excursión aunque es exigente físicamente.  (fuente: descripción de recorrido hecho por ártabros.com)

Montserrat A.

From Neda to San Sadurniño.

This weekend of May we have toured part of the basins of the Castro and Belelle rivers. The walk is a saying because the difference and the total km were not few but as always, it was worth it. The weather was fantastic and that made the landscape much more enjoyable, which in itself is wonderful and worth seeing and making the effort.

In spring it is known that nature awakens and everything is full of life and color but, if that were not enough, strolling between fervenzas like Naraío and Belelle still includes more intensity and spring passion if possible.

The first stop was in Narón for a coffee and a breakfast, necessary to take strength and start the new adventure. From there we took the bus to the Igrexa feita car park where we started the descent and started to warm up leg calmly until we reached the Castro river passing through the village of Remiceiro. We walk parallel to the river surrounded by the typical vegetation of the riverbank like Sauces, Freixos, hazel trees and some oak and chestnut.

The road surprised us because it is full of newts and frogs, which were scared to see so many people pass through a place so quiet and little traveled. We follow the path that led us to a promontory that dominates the entire valley, crowned by the Naraío Castle built at the beginning of the 14th century although its condition is ruinous and there is very little of it, however, it is interesting to visit it and see the surroundings .

When descending, towards the hydroelectric power station we found a detour that took us to the impressive Cascade. It was beautiful and the place full of energy although the space that was as a viewpoint was small and we had to take turns to see it, without being a problem.

From there, we crossed the village of Riolimpo and continued downstream until we reached the main town of Naraío, which we accessed by the Puente da Ferrería.

We started the ascent to Monte da Louseiras, but first we invested time in casting an eye on the Baroque church of Santa María. Little by little we were gaining altitude until reaching 452 mt but not without delighting with the landscape that surrounded us: Face to the SO the Ría de Ares, A Coruña and to the bottom the Sisargas, at our feet the Ría de Ferrol, to the NO Valdoviño , to the Sierras da Capelada and A Faladoira, facing East, O Forgoselo, Monte Fexa and more to the Sierra de "A Cova de Serpe". If this were not enough, to the South the Sierra de Montemayor with Mount Xalo taking the thermal power station of Meirama as its back.

After a short rest, because beauty has a price, we descend to the Belelle River basin and walk along its haunted riverbank until we reach a small reservoir, the dam of La Fervenza, where the canal that accompanied us to a small lake begins " spillway "that marks the point of descent until the second fervenza. The fervency of Belelle, unlike that of Naraío, is its height and much more impressive. It is worth the effort and see the wonders of nature and more if the day accompanies as accompanied.

From there we only had a small ascent to a beautiful viewpoint from where we could see the entire waterfall, since it has several sections. From this point at the end of the tour there was little left but before we could still visit a small church of "Santo André de Viladonelle".

This excursion, apart from being beautiful, requires some effort and preparation. It is cataloged by experts in medium difficulty and medium effort although that will depend on the physical preparation of each one as well as their lung capacity. The total distance covered was 20 and a half kilometers and a maximum height of 452mt. I recommend this tour although it is physically demanding. (source: description of the route made by ártabros.com)

Montserrat A.