Estos son los dos enemigos más nocivos del humano debido al
freno que
nos produce a pensar, ejecutar y tomar la decisión más adecuada.
Los miedos y el resentimiento son grandes enemigos para
alcanzar nuestros objetivos. El miedo es como un gigante invisible al que todo
el tiempo debemos vencer. Los resentimientos producen un gran despliegue de
energía nociva que es autodestructiva.
El miedo es muchos casos funciona como un mecanismo de
defensa natural pero también nos paraliza, nos deja inmóviles para poder
avanzar en nuestro camino. Al sentir miedo nos ponemos a la defensiva , creamos
un escudo alrededor nuestro en el que, irónicamente, también quedamos
encerrados
Nuestra mente con sus pensamientos es una gran creadora de
realidades. El mundo que percibimos es consecuencia de nuestra manera de ver,
interpretar y sentir.
Hay varias clases de miedo: el miedo a hechos concretos, a
eventos inesperados, el miedo al futuro, al fracaso, a no ser aceptado, a no
ser querido, al rechazo… lo primero que debemos hacer para vencer un miedo es
detectarlo y definir su causa. Una vez que detectemos el miedo, debemos pensar
en las opciones para revertirlo.
Otro gran enemigo es el resentimiento. Los resentimientos
son más simples de detectar porque se manifiestan de manera más concreta.
Hay algunas estrategias para controlar los resentimientos.
Un buen ejercicio es tomarse un minuto por día y concentrarse en no pensar nada
negativo al menos durante ese tiempo.
Los miedos y resentimientos, cuando no son patológicos,
pueden trabajarse desde la comprensión hacia uno mismo, la compasión y
practicando el perdón. Estoy convencida que en cuanto reconocemos los miedos y
aceptamos el origen de nuestros resentimientos , estamos preparados para
empezar a perdonar y a olvidar todo aquello que nos hace daño y no nos aporta
nada más que energía negativa que nos mengua la capacidad de ser felices y
continuar mirando hacia delante con nuevas perspectivas y nuevos horizontes. Es
un proceso de aprendizaje y todos, en igual medida, tenemos derecho a cometer
errores y que esos errores sean comprendidos y rectificados.
Solo de este modo, creceremos , aprenderemos y seremos
capaces de avanzar y continuar nuestro camino.
Montserrat A.
Fear and resentment
These are
the two most harmful human enemies because of brake that makes us think, run
and take the most appropriate decision.
The fears
and resentment are great enemies to achieve our goals. Fear is like an
invisible giant who must overcome all the time. Resentments produce a great
display of harmful energy is self-destructive.
Fear is
often functions as a natural defense mechanism but also paralyzes us, still
leaves us to move forward on our path. Feeling afraid we get defensive, we
create a shield around us in which, ironically, were locked
Our mind
with your thoughts is a great creator of realities. The world we perceive is a
result of how we see, interpret and feel.
There are
several kinds of fear: fear of facts, unexpected events, fear of the future, of
failure, of not being accepted, not loved, rejection ... the first thing to do
to overcome a fear is to detect and define their cause. Once we detect fear, we
must think about the options to reverse.
Another
great enemy is resentment. Resentments are easier to detect because they are
manifested more concretely.
There are
some ways to handle grievances. A good exercise is to take a minute a day and
concentrate on not think of anything negative at least during that time.
The fears
and resentments, when they are not pathological, can be worked from
understanding oneself, practicing compassion and forgiveness. I am convinced
that once we recognize the fears and accept the origin of our resentments, we
are ready to begin to forgive and forget all that hurts us and gives us nothing
but negative energy wanes us the ability to be happy and continue watching
forward with new perspectives and new horizons. It is a learning process and
all in equal measure, we are entitled to make mistakes and that those mistakes
are understood and rectified.
Only in
this way, grow, learn and be able to move forward and continue our journey.
A. Montserrat
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